El flagelo de las drogas es desde hace un tiempo un tema de debate que generalmente suele enfocarse sesgadamente en los adolescentes, ya de por sí estigmatizados. Si bien las prevalencias de consumo de drogas son más altas en la adolescencia y las edades de inicio rondan, en promedio, los 16 años, es importante situar el problema de la droga en su contexto político, económico y, sobre todo, social, para comprenderlo mejor y comprometer así a toda la sociedad.
Son pocos los debates que escapan de lógicas reduccionistas e incluyen a todo el entramado social. A veces es como si "la adolescencia" o "los jóvenes" crearán el problema independientemente de toda una estructura que produce, provee y comercializa las sustancias definidas como drogas ilegales dentro de un contexto social cada vez más tolerante al consumo.
Abordar el problema desde una perspectiva más amplia nos obliga también a revisar, desde nuestros valores como sociedad, hasta la acepción misma del término "droga".
El problema de las adicciones es un fenómeno multidimensional y pluricausal, por lo tanto no es un problema sólo de "drogas". Es un problema personal, lo es también familiar, social, de salud, afecta la vida laboral, impacta en el sistema sanitario, impacta también la productividad del país; pero por sobre todas las cosas, es un problema de todos como sociedad.
En consecuencia, la atención de las adicciones debe abordarse de forma conjunta y articulada entre los organismos estatales (salud, educación, trabajo, desarrollo social, etc.), la sociedad civil y la comunidad; un camino que en nuestro país se ha comenzado a transitar, pero del cual queda mucho por recorrer.
Enfocando a las adicciones desde esta perspectiva más amplia, será en la participación, la articulación y el trabajo conjunto donde deberán gestarse las respuestas y alternativas de tratamiento de las adicciones.
Desde este punto de vista es donde adquiere cada vez mayor importancia la prevención, una prevención basada en la evidencia, con instancias de participación y evaluación que nos permitan no andar a ciegas ni a solas, un camino todavía difícil por recorrer. Roberto Canay (Agosto 2011, lanacionar)
Roberto Canay es Consultor del Observatorio Social a cargo de los proyectos de Consumos Problemáticos; es director del Observatorio de Adicciones del Ministerio de Desarrollo Social porteño; Director del capítulo nacional de Argentina de la International Society of Substance Use Professionals (ISSUP) www.issup.net , entre las actividades más destacadas que desempeña en la actualidad.